Trabajar desde casa puede ser un sueño cumplido, pero todo comienza a enredarse cuando los límites entre oficina y familia no son bien delimitados, más si tienes hijos pequeños. ¿Cómo lograr salir de este reto sin descuidar las labores del hogar? Es la pregunta reiterada entre quienes comienzan a ejercer el teletrabajo.
El éxito para trabajar desde casa, sin dejar de atender a los hijos está en la organización, no solo de tiempo y espacio, sino de emociones. Papá o mamá deben entrar en conciencia de que, aún en el hogar, se requiere de agendar tareas, enfocar objetivos y reestructurar espacios.
Cambios necesarios para trabajar desde casa
Comienzas a trabajar desde casa. Estás frente al computador y de repente llega tu hija de dos años a mostrarte el dibujo que hizo para ti, suena tu teléfono, hay que atender porque es el cliente que espera por esa redacción que aún no está lista y tu nena insiste en que mires su obra de arte. ¿Te ha ocurrido?
Para no terminar estresada y agotada frente a esta situación, será primordial organizar y crear espacios bien definidos, que marquen las diferencias conceptuales entre horas de labor y ocupación hogareña, aspectos que deben tener presente todos los integrantes de la familia.
A continuación encontrarás algunas sugerencias de cómo lograr el trabajo remoto y no sentirte culpable por dejar de atender a los niños.
Busca tu espacio para trabajar desde casa
Si la oficina se muda al hogar no puedes invadir lugares comunes como el comedor o la sala. El teletrabajo necesita de entornos cómodos. Rediseña y haz tu espacio ideal para cumplir con las actividades remotas.
Delega responsabilidades
Si tus hijos están pequeños puedes buscar la ayuda de familiares o de una niñera para que cuide de ellos. Trata de armar un plan de contingencia en caso de que necesiten urgentemente de ti.
Explica con confianza y palabras sencillas
Los niños entienden y se pueden adecuar a las rutinas que se establezcan. Si tienen un poco más de un año, coméntales que cumplirás con actividades laborales dentro de la casa, pero que deben entender tus horarios. Comienza respetándolos tú y no rompas tus propias reglas.
No dejes vacíos
Deberás levantarte temprano, dejar listo todo lo de los bebés, incluyendo desayunos y meriendas. Si puedes hacer tiempo y almorzar con ellos sería ideal, para que tus pequeños nunca sientan que el trabajo les quita tu tiempo y atención.
Inspira disciplina
Cuando los niños son más grandes, el camino puede hacerse más fácil. Si dejas las reglas claras desde el principio y te conviertes en su propio modelo de constancia y disciplina, ellos entenderán que deben colaborar para que cumplas con tu jornada sin inconvenientes.
Organización, disciplina y responsabilidad, son aspectos claves para hacer del trabajo en casa una experiencia exitosa sin abandonar el cuidado de los hijos. El mundo exige cambios, no solo de estilos, sino de paradigmas. Lo principal es enseñar a los pequeños con el ejemplo, marcar pautas que sean cumplidas y que no rompan con la armonía que debe imperar en todo hogar.